viernes, 14 de diciembre de 2007

CUENTO: LO QUE ELLA DEJÓ

“Lo que ella dejó”

Odio que me pregunten al respecto, volver a traer todos los recuerdos a la mente de ese día tan triste para mí, es algo que no me entusiasma mucho.
En mis días, todo era hermoso. El azul del cielo que te miraba desde arriba esperando que el dueño de la tierra lo salude, el caminar gracioso de los cangrejos, que daba cada vez más gracia al que los veía y el hermoso movimiento de las olas, que siempre volvían y se desvanecían. Nunca se iban. Todas esas cosas que le hacían a uno olvidarse de los problemas de siempre y entrar el cuerpo en la naturaleza pura que el mundo nos prestaba. Nadie pensó nunca, que esa paz, se volvería violenta y se vendría en contra de nosotros, de mí. Ahora esas olas se nos derrumbaban en nuestros cuerpos enteros. Me estaba destruyendo. El océano entero estaba haciendo su rebelión, o quizás volvía a ser como era antes y durante todo este tiempo estaba haciendo una especie de pausa en sus movimientos. Apenas la noté, empecé a correr rapidísimo, para escaparme de esa malvada, escaparme de ese infierno que ella había dejado. La desesperación que tenía, por salir, por irme de ahí, pero también de quedarme para ayudar a los que se habían quedado atrás, a los más desprotegidos. Pero a quien engaño, la victima fui yo.
Quería que todo termine, no sabía cuanto más iba a durar. Al llegar a casa corrí rápido al sótano. Me quedé ahí, pero no aguantaba más. Tenía que superarlo, o al menos mi propio miedo. Decidí salir, total no había nadie después que llorase por mi cuerpo herido. Pero algo raro pasó; al salir, no había nadie. ¿Se habían muerto todos o era solo un espejismo mío? Me preguntaba. Me estaba derrumbando. Casi muero, pero decidí vivir, entonces luché para salir de ahí y esperar que todo termine. Cuando pude salir de esas intensas gotas que no me dejaban respirar, entré a mi casa para ver a mi única familia. Lo alimenté porque no sabía que más hacer con él. Me dijo que quería salir afuera, para volver a sus orígenes. Lo entiendo. No debe ser muy cómodo vivir en un recipiente. Así que lo saqué por un huequito que encontré. Todavía me preguntaba en donde estaban todos, me sentía muy solo. Volví a salir a la calle para ver si encontraba a alguien. Salí creyendo que iba a ser un canal de Venecia pero al ver hacia fuera y ver las calles secas como antes, me di cuenta de algo, y recordé: El brusco movimiento de su triste lágrima. Lo que ella dejó. Su tristeza en mi corazón.

lunes, 10 de diciembre de 2007

cuento "La Nada"

“La Nada”

Sam tenía 14 años. Era un chico normal, con el pasatiempo de caminar por todo el vecindario. Le gustaba estar afuera, a la luz del día, por un problema que tuvo unos cuantos años atrás. Cuando tenía 6 años, se quedó encerrado en el sótano oscuro de la escuela, nadie lo escuchó, y se quedó ahí hasta que pudo salir por una de las ventanas. Desde ese momento, no quiso estar más en la oscuridad. Por eso es que le gustaba caminar bajo la luz del sol. Todos los días salía a las 3 después de almorzar y volvía a las 7 de la tarde.
Un domingo, salió como de costumbre a caminar por el barrio. Iba muy entusiasmado con el propósito de una linda caminata. Había un sol radiante que lo encandilaba. Caminando encontró en una avenida, un pozo. Se acercó curiosamente para ver que había ya que no sabía que encontraría. Cuando estaba al lado, vió que un camión se le acercaba. Mirándolo, cayó al pozo. Se sentía muy extraño.
El pozo era muy profundo por lo tanto, al caer, se golpeó la cabeza y quedó inconciente por un momento. Cuando abrió los ojos, vió que el lugar era rojo y estaba vacío. Le llamó la atención que el hueco por donde el se había caído, ya no estaba aunque le pareció solo una ilusión. Pensaba que estaba en un sueño, pero no se sentía como si estuviese en uno. No había nadie y estaba todo oscuro. Fue en ese momento que empezó a sentir aquel “miedo”. Ese que le traía tan malos recuerdos.
Cerró los ojos, tratando de despertar de esa horrible pesadilla. Unos minutos después, alguien le tocó el hombro. Sam dio un pequeño salto por el susto. Cuando se dio vuelta, vió que era una chica, una chica distinta que le dijo:
_Soy Parker, ¿y tú?
_Yo me llamo Sam. ¿En dónde estamos?
_nadie sabe cuál es su nombre, pero a mi me gusta llamarla “la nada” ya que no puedes hacer nada, no sientes nada y lo más interesante es que una vez que entras, ya no puedes salir.
Sam empezó a buscar alguna salida en ese lugar infinito que lo único que parecía darle era tristeza e impotencia. En sus pálidos ojos, se le notaba claramente la desesperación que tenía.
_No hay salida, no me hagas repetírtelo.
Esperó unos segundos, y viendo que el aún no reaccionaba, dijo:
_Está bien, haz lo que quieras. De todas formas tu búsqueda no cambiará nada.
Sam se fue a un rincón y se puso a llorar. Empezó a pensar en todas las cosas que había perdido y añoraba más que nunca. Estuvo así por mucho tiempo, pasaron días, meses y años y él seguía en ese rincón, con una compañía que en realidad, no lo acompañaba. Esperando que algo sucediera. Cada vez pensando más, en porqué hace ya tanto tiempo, él se había asomado a ese maldito pozo que le consumió la vida. ¿En dónde estarán mis padres? Se preguntaba él, tratando de encontrar una respuesta invisible.
Un día le preguntó a Parker:
_ ¿Cómo llegaste hasta aquí?
_Yo nunca llegué, siempre estuve aquí.
_ ¿Qué quieres decir? Entonces… ¿yo cómo llegué?
_ ¿Nunca escuchaste el término “la curiosidad mató al gato”?

realidad del agua

Cuando los ríos se queden sin agua, no va a llegar ninguna gota a los hogares, aunque las familias paguen mucho dinero. Ya todos tendríamos que aceptar que el agua se está acabando, que no es un recurso que se va a poder reparar cuando desaparezca definitivamente.
El agua que vemos en los mapas, es mucha. Pero es salada y nadie la puede usar. Por eso hay que cuidarla. Hay que cerrar la canilla mientras uno se lava los dientes o se afeita, hay que bañarse en el menor tiempo posible y ahorrar en todo lo que se pueda.
Si bien creemos que con la poca agua que uno malgasta, no hay ningún cambio, si hay cambio, y es muy importante que cada uno tome conciencia para que les dejemos a nuestros hijos, nietos y bisnietos parte de este imprescindible elemento. Y quizás, es menor el tiempo que nos queda para disfrutar del agua y tal vez se acabe mañana. Ahí, nosotros sufriríamos las consecuencias. Este mensaje va también para las industrias, que gastan mucha agua en los procesos de producción y para el riego, en la agricultura. De esa forma, permitimos que otra gente se pueda bañar con agua caliente en invierno, o pueda tomar agua para vivir.
En los países en vías de desarrollo, el 90% de las muertes son producidas por diarrea, al faltarle a la gente agua potable e higiene. Esa agua potable, es desperdiciada por mucha gente, que aun vive y todavía tiene la oportunidad de lavarse la cara o hacerse un café a la mañana.
Aunque recién cuando se pierden las cosas, se empiezan a apreciar, con los recursos no renovables como el agua, no se puede esperar tanto para apreciarla, porque ya va a ser demasiado tarde; y el impacto va a caer en todos. Por eso cuidemos el elemento crucial para nuestra existencia, antes de que sea muy tarde. No es difícil. Solamente hay que usar lo justo y necesario, ni una gota de más. Porque cada gota, es sagrada.

Sense of Beauty, otro poema en ingles...

“Sense of Beauty”

Painted mountains in the sky, on the ground, in the trees
Painted mountains full of beauty, colours and shades
That thrills anybody who sees them.
Great clouds near them, on top of them
Blocking the brownish entrance to an unknown mystery world

I can barely see the last image of the sun
Its remains, telling me good-bye
The last trace of light, going away
To a special place, where birds remain

Beautiful creatures going somewhere in the sky
Looking at us, with their tricky style
Going upper and upper like helium balloons
Full of fantasy, fantasy in blue

Green. That’s the colour my eyes see
Green leaves, gorgeous trees
You see their veins from here
Their big and bloody veins

I can feel the love coming from here
The bright and cheerful atmosphere
Smiling, welcoming, flirting at me
With all its charm and happiness

I can touch the love when I hold a leave
When I observe an animal, an insect
And its amazing tricks
I can hear the turtle’s sound

Only, only if I think,
I will have love
Only if I apreciate what’s around me
I will start feeling the love coming from it

poema en ingles: posioned rumor

espero que entiendan, seguramente tengo millones de errores de gramatica.

“Poisoned Rumor”

Why can’t they mind their own business?
Why can’t they just see themselves?
I am trying to survive in this big rumor sky
Which was built by those stupid fools
Who invented the nonsense rules
Of gossiping and gossiping
Till the air is full of smoke

Are we doing something wrong?
Should we ignore them or tell them that they’re wrong?
I don’t know what to do, please
Let me breathe. The smoke is killing me
Clear the breeze

Your smoke is contaminating me
You are just like a bee, please
Don’t kill me with your poison
Let me be

Well, I can not control any of your moves or thoughts
But I can control one little dot
If you wanna talk
Talk freely and as you wish
But beware that if you look at me
I won’t be crying like I did